Cómo elegir la bañera y el lugar más adecuado para el baño del bebé


     El baño es, además de un hábito necesario de la higiene de nuestro hijo, un momento relajante y divertido para la mayoría de los bebés... ¡y también los padres! Conviene que, desde el principio, elijamos la bañera y el lugar más adecuado para bañar a nuestro bebé ya que, de ese modo, podremos despreocuparnos y disfrutar con nuestro hijo del momento del baño.

     Durante los primeros meses de vida del bebé, conviene bañarle en una bañera específica para bebés.

     La bañera del bebé debe ser anatómica y de plástico antideslizante. Puede colocarse encima de una mesa o dentro de la bañera de los adultos, aunque esta última opción resulta más incómoda. 

     En el mercado existen muchos tipos de bañeras: de plástico, plegables, bañera-cambiador, inflables...

     Las bañeras-cambiador evitan tener que trasladar al bebé a otra habitación y tener que preparar un sitio diferente para secarle y vestirle. Suele ser cómodo que pueda colocarse sobre una mesa o superficie elevada para no tener que agacharse.

     Existen hamaquitas o soportes, para colocar al bebé; los cuales se instalan en las bañeras.
     En cualquier caso, asegúrate de que la bañera sea estable cuando el bebé se encuentre en su interior y de que el material de fabricación no sea tóxico.

     La habitación dónde bañes a tu bebé debe estar a una temperatura agradable, aproximadamente unos 22 grados, y no debe tener corrientes de aire, focos de luz directa ni ruidos. De este modo, favorecerás que el baño sea un momento agradable y relajante para tu bebé.


Fuente: Equipo editorial Elbebe.com